Una oportunidad de negocio se le abrió a Alejandro Saavedra gracias a la pandemia. Ante la necesidad de implementar todos los cuidados para prevenir y disminuir los riesgos de contagio por COVID, creó un emprendimiento de túneles desinfectantes a un precio más económico pero de alta calidad. ¡Conoce el emprendimiento de la semana!

Por María Luisa Galán

Luego de realizar un proceso de terapia de salud mental, Alejandro Saavedra decidió emprender. Era el momento preciso para retomar las riendas de su vida y así tener su tiempo ocupado. En su búsqueda se encontró con el boom de las cabinas sanitizadoras. Una amiga las estaba vendiendo con mucho éxito a pesar de tener un valor que superaba los dos millones de pesos. “¿Por qué no hacer unas para el pueblo?”, se preguntó. Sabía cómo hacerlas y además contaba con la asesoría de un amigo ingeniero en automatización y tenía la garantía que necesitaba para que el negocio fuera viable. “Como tengo la licencia de jefe de obra, sabía que podía construirlo y que fuera certificado”, dice. Postuló a distintos fondos sin buenos resultados hasta que su hermano creyó en su proyecto y se asoció como financista.

Saaditek se llama su emprendimiento de cabinas sanitizadoras. Comenzó hace tres meses con apoyo de fundación Emplea, del Hogar de Cristo, a través del Programa Orientación Socio Laboral, el cual busca fortalecer las competencias laborales de sus participantes. Ahí lo ayudaron a hacer su currículo, asistió a talleres de apresto laboral y aprovechó todas las oportunidades que le ofrecieron, como hacer un video promocional (pincha el link para verlo) sobre su pequeño negocio. Además le ofrecieron un subsidio para comprar herramientas y así se equipó para comenzar de nuevo.

Las cabinas tienen un valor que van desde los 950 mil pesos más IVA; hay unas de exterior y otras de interior, éstas últimas sube en 100 mil pesos su valor, porque incluyen un sistema de membranas y drenaje.

“Soy bien motivado. Necesitaba sentirme útil, porque el trabajo es el mejor protector que tengo”, cuenta Alejandro sobre la energía que hoy desborda, feliz luego de haber finalizado con éxito su etapa por un Programa Ambulatorio Intensivo por consumo problemático de alcohol y otras drogas. En paralelo a las cabinas, tiene otro emprendimiento relacionado al oficio de toda su vida que hoy retoma. Es contratista de construcción y en esa área hace de todo, desde trabajos menores como arreglar una puerta hasta grandes proyectos como construir una casa.

Pronto tendrá redes sociales para dar a conocer su trabajo. Mientras, puedes contactarlo al teléfono +56 9 33905252, al correo saaditek@gmail.com

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