Los actores Beto Espinoza, Sandra Donoso y Belén Mora estuvieron de visita en la ciudad, presentando su show televisivo. Lo mejor es que, aprovechando la ocasión, compartieron la hora de la comida con participantes del Hogar de Cristo.

Por María José von Mühlenbrock

“Fue sorpresivo incluso para los trabajadores del Hogar de Cristo. Ellos sólo sabían que tendríamos unos invitados especiales, así es que cuando llegaron a la Hospedería fue una tremenda emoción para todos”, comenta David Martínez, Director Ejecutivo del Hogar de Cristo Sede Antofagasta.

La invitación para visitar el programa del Hogar de Cristo sirvió para que los participantes de la Hospedería conocieran en persona a los rostros de Morandé con Compañía y compartir con ellos gratos momentos a la hora de la comida. “Varios no podían ni comer. Yo les insistía que lo hicieran, pero me respondían que no podían porque estaban muy nerviosos. ‘Cuándo me iba a imaginar yo que la Belén o la Sandra me iban a atender y servir la comida’, me decían”, agrega David.

Y esa fue justamente la invitación: servir la comida, compartir, conversar un poco y ayudar a romper la rutina de los 35 participantes que ese día se encontraban en la Hospedería.

“Para nosotros fue una experiencia muy enriquecedora y muy necesaria para conocer otras realidades”, dijo Beto Espinoza. “He participado en varias Cenas Pan y Vino. He estado animando en las de Castro, San Fernando, Iquique y Concepción, y conozco un poco el trabajo que se realiza a nivel local, pero a Antofagasta no había tenido la oportunidad de venir y tampoco de visitar una hospedería, así es que acepté de inmediato la invitación. ¿Si la experiencia fue buena? Totalmente. Nosotros estuvimos media hora y ver el trabajo que hacen los voluntarios y trabajadores del Hogar fue increíble. Además conocimos a la gente real, de carne y hueso, no a través de un video o de las páginas de una revista, como me había pasado hasta ahora. Así es que más que agradecido de haber sido parte de ese momento”.

Para Sandra Donoso la experiencia también fue única. “Es la primera vez que participo de algo así y la recepción fue muy cálida. Increíble. Todos nos reconocieron, sabían perfectamente que éramos actores de Morandé con Compañía; o sea, igual nos ven! Y estaban súper felices y agradecidos, lo que fue lindo, muy, muy lindo”.

Una vez finalizada la visita, los actores se retiraron entre aplausos, fotos, abrazos y mucho cariño, felices de haber tenido estos momentos con los participantes de la Hospedería y las puertas quedaron más que abiertas para repetir la experiencia.

“Sí, de todas maneras”, agrega Sandra, “fue lindo compartir con ellos un rato, servirles la comida, acompañarlos en la oración que hacen antes de comer, después retirar la mesa, lavar los platos y ayudar a la chica de la cocina, que tiene harta pega. Fue súper cortito, habremos estado media hora, pero fue muy bonito. Lo haría mil veces, mil veces más, me encantó”.

Y Beto remata. “Todos quedamos bien entusiasmados y agradecidos de la invitación, de haber podido ser parte de esto. A uno le quedan ganas de hacer más cosas, así es que con tiempo, encantados de volver”.