May
2016
Cuenta pública no considera medidas específicas que aseguren la reinserción de casi 100 mil jóvenes excluidos del colegio
Durante el sábado se realizó la tercera cuenta pública del segundo mandato de Michelle Bachelet, en el Congreso Nacional de Valparaíso. Los principales temas debatidos que trató el discurso de la Presidenta fueron la educación, el crecimiento económico y cómo se debe avanzar en disminuir la brecha social existente en el país.
En torno al debate sobre educación, nuestro Director Ejecutivo, Juan Cristóbal Romero, manifestó su preocupación porque el discurso no considera medidas específicas que aseguren la reinserción de los casi 100 mil jóvenes excluidos del sistema escolar, “pese a que esta problemática está mencionada en el programa actual de Gobierno. Valoramos las iniciativas que fortalecen la educación pública, sin embargo, esto resulta insuficiente si no consideran una oferta especializada para esta población”, indicó.
“Reiteramos nuestra propuesta de crear la modalidad de reinserción educativa, es decir, una metodología que atienda la particularidad de estos jóvenes que han sido expulsados del sistema regular. El reconocimiento y financiamiento de un piloto que rescate la experiencia de este tipo de escuelas, permitirá nutrir la propuesta en términos de currículo y tipo de subvenciones. Para ejemplificar, podemos señalar que el costo por la educación de un joven en nuestras escuelas de reinserción asciende a $250 mil al mes, frente a la subvención de $80 mil que se entrega en la única modalidad existente hoy”, concluyó nuestro Director Ejecutivo de las Fundaciones Hogar de Cristo.
Nuestras medidas para la reinserción escolar:
En Chile, miles de niños y jóvenes son excluidos del sistema escolar. Según los últimos datos de la CASEN, 99.530 niños, niñas y adolescentes entre 6 y 18 años no estudian por diversas razones. De ellos, 21 mil pertenecen a los segmentos más pobres del país y no pueden acceder al sistema educativo por sus altos niveles de vulnerabilidad.
La reinserción escolar efectiva requiere de una institucionalidad estable y de inversión. Los costos se pueden cubrir a través de una subvención permanente o un aporte basal con compromisos de desempeño, tales como los Sistemas de Administración Delegada.