Durante décadas, el Hogar de Cristo ha estado presente en las diferentes comunidades de nuestro país, ayudando a aquellos cuyos derechos han sido vulnerados y proveyendo soluciones a problemas de derechos básicos, como alimentación y comida. Son muchas las acciones sociales que se desarrollan a diario para lograr una sociedad más justa y generosa.

Para involucrarte en ellas, te invitamos a conocer estos 8 datos sobre nuestra fundación y puedas comprender y compartir nuestra lucha. Descubre aquí más de una razón para ser parte las acciones de bien social y solidaridad del Hogar de Cristo.

Hogar de Cristo, mucho más que acciones sociales

Nuestra causa no implica simples actos de bondad y caridad; representa un esfuerzo constante por lograr que la igualdad de oportunidades sea posible. No somos sólo una ayuda momentánea; proveemos herramientas para dignificar y dar opciones de integración a miles de chilenos, lo más vulnerables. Estas son algunas de ellas:

1. Educación Inicial: estadísticas de un compromiso social

Más del 57% de los niños y lactantes de 0 a 4 años en Chile, no asiste a una sala cuna o jardín infantil. De ellos, un 16,6% vive en condición de pobreza por ingreso y un 28,6% en pobreza multidimensional.

Esto evidencia la necesidad de implementar programas enfocados en la educación inicial, etapa clave a la hora de emparejar la cancha. El Hogar de Cristo tiene 38 jardines infantiles y salas cuna, en territorios especialmente vulnerables, de Arica a Punta Arenas, que logran más de un 70% de asistencia, sobrepasando el 50% del promedio a nivel nacional. Las estadísticas refuerzan nuestro compromiso a ofrecer el mejor nivel educativo, que permita a los niños desarrollar sus capacidades al máximo, respetando sus derechos y los de sus familias.

2. Infancia vulnerada =  un futuro vulnerado

Existe una considerable población de niños y adolescentes en Chile a quienes el Estado ha resuelto separar de sus padres o tutores, debido a la grave vulneración de derechos en que viven. Sin recursos para cubrir sus necesidades básicas de alimentación, salud, educación, vivienda, cohesión social y otros elementos que influyen en su bienestar, además de padecer todo tipo de violencia.

Pensando en estos niños, Hogar de Cristo cuenta con 7 residencias de protección distribuidas por todo Chile, para así restablecer el derecho de estos niños de vivir en un entorno familiar adecuado, buscando cumplir con los más altos estándares de atención de acuerdo a la experiencia internacional.  

3. Reinserción educativa: reconstruyendo el presente

Más de 222 mil niños, niñas y adolescentes se encuentran fuera del sistema escolar, una desescolarización derivada en gran parte a la situación de pobreza extrema de sus familias. Sin embargo, otro elemento que ha influido en esta problemática, es el hecho de que muchos padres y cabezas del hogar, tampoco han terminado su enseñanza obligatoria.

Fundación Súmate del Hogar de Cristo lleva 25 años trabajando incansablemente para aportar soluciones al grave problema de la exclusión educativa con escuelas y aulas de reingreso, además de programas socioeducativos territoriales en diferentes regiones de Chile.

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4. Personas en situación de calle, realidad de miles

Son un grupo prioritario para Hogar de Cristo. Sabemos que más de 15 mil personas se encuentran en esta condición, ya que ese es el número que atendemos al año. Ellas reflejan una de las situaciones más crudas de exclusión social, consecuencia de un proceso de desafiliación, que instala a estas personas en un estado de abandono y aislamiento, lo que se traduce en vulneración de sus derechos humanos básicos.

En Hogar de Cristo, nos preocupamos por ayudar y atender a estas personas, creando casas de acogida y hospedaje que brinden abrigo durante la inclemencia de la noche y proveyendo alimentación y apoyo básico, pero también trabajando para que recuperen sus vidas.

5. Adulto mayor, destino seguro

Los adultos mayores están frecuentemente afectados por la condición de dependencia, ya sea leve, moderada o severa. A esta realidad, se suma el que a menor nivel de ingreso, más alto es el nivel de dependencia.

Nuestra red de servicios se esfuerza por fomentar el desarrollo y mantención de las funcionalidades de los adultos mayores, incentivando su inclusión social a través de sus capacidades individuales, familiares y comunitarias, aumentando su calidad de vida. Además, hemos desarrollado programas de atención domiciliaria, centro de encuentros especializados y residencias en beneficio de los adultos mayores más vulnerables.

6. La situación de discapacidad mental y la discriminación

Esta problemática se evidencia en la escasez de presupuesto destinado para atender las necesidades de las personas que se encuentran en esta situación, ya que el monto destinado a la salud mental no supera el 2,3% del total destinado a la salud pública, cuando ese porcentaje debería ser de al menos 5% según la Organización Mundial de la Salud.

Este presupuesto tiene la finalidad de financiar servicios de prevención, promoción y tratamiento que mejoren la calidad de vida de las personas con alguna condición de discapacidad mental, especialmente de aquellos en situación de pobreza, porque sufren una doble exclusión. Hogar de Cristo desarrolla acciones de inclusión y apoyo para estos adultos a través de 3 programas de modalidad residencial, ambulatoria y domiciliaria, que brindan apoyo a los afectados y sus familiares.

7. Acciones sociales para evitar el consumo problemático de alcohol y otras drogas

Encuestas de los últimos años estiman que casi 700 mil personas entre 12 y 59 años presentan algún tipo de consumo problemático de alcohol y otras drogas, de las cuales unos miles viven en situación de pobreza y exclusión social.

La oferta terapéutica para ayudar a estas personas es escasa, en especial para las mujeres. Hogar de Cristo entrega apoyo y acompañamiento de forma gratuita y especializada, entendiendo que es un problema que surge como una respuesta adaptativa a las continuas experiencias de carencias y exclusión.

8. Inclusión laboral, creando nuevas oportunidades

Cerca del 25% de la población económicamente activa, entre 18 y 59 años, que está en situación de pobreza, se encuentra desocupada. Una gran cantidad de personas si consideramos que son más de 700 mil en todo Chile quienes están en edad de trabajar y con potencial para activarse laboralmente.

Muchos de ellos no han logrado terminar la enseñanza básica obligatoria, otros nunca han trabajado o son adultos mayores que, a pesar de estar en edad laboral, no lo hacen por ser potencialmente vulnerables. En este grupo también hay personas en condición de discapacidad física o mental, que fueron privadas de libertad, que viven en situación de calle y que son jóvenes en pobreza desescolarizados y sin ningún tipo de capacitación.

Teniendo en cuenta que estas razones no son impedimentos para que se les brinde una segunda oportunidad, Hogar de Cristo, a través de la Fundación Emplea, trabaja porque logren la inclusión laboral y logren incorporarse y mantenerse en un empleo, para así mejorar su calidad de vida y la de sus familias.

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Únete a nuestras acciones sociales

Tú puedes ser parte de estos cambios positivo, uniéndote a nuestra familia de colaboradores, sin los cuales, ninguno de los programas mencionados podrían funcionar. Conviértete en socio colaborador o haz un aporte a través de una donación; tú decides cómo ayudar.