El proyecto que se viene gestando desde 2009, contempla la construcción de dos edificios. El primero de alrededor de mil metros cuadrados albergará a los usuarios de Hogar de Cristo durante 22 meses, mientras se termina la obra definitiva, un moderno edificio de 1.238 metros cuadrados.

Por Daniela Calderón P.

“Estoy como perro con dos colas”, dice Yerko Villanueva, jefe social de la región de Los Lagos, al hablar sobre la alianza entre Hogar de Cristo y la Municipalidad de Osorno que les ha permitido avanzar en la planificación de una nueva Hospedería para la ciudad.

El proyecto, financiado gracias a un Fondo Nacional de Desarrollo Regional, contempla la construcción de un primer edificio, al que se ha denominado plan de contingencia, a un costado del Liceo Industrial de Osorno y a 50 metros de la actual Hospedería. Esa obra servirá como residencia temporal para los usuarios durante los próximos 22 meses, tiempo en que se construirá el segundo y definitivo edificio, en Paula Jaraquemada 570, que albergará a la nueva y renovada Hospedería para personas en situación de calle de Osorno. Gracias a esta alianza entre el municipio y Hogar de Cristo, una vez desocupada, la primera construcción, ubicada en Guilllermo Holstein 125, pasará a formar parte de las instalaciones del Liceo Industrial de la ciudad.

“Es un sueño cumplido porque hemos estado trabajando en este proyecto por muchos años. En 2009 empezamos a pensar y soñar una hospedería, todo esto por la necesidad y el crecimiento explosivo de las personas en situación de calle en la región. Ha sido un camino duro donde hemos tenido que investigar distintas alternativas y nos hemos encontrado con el desafío de encontrar un terreno. En esta búsqueda, la alianza estratégica con el municipio ha sido tremendamente necesaria, ya que hemos podido aunar muchos esfuerzos y voluntades para que este sueño, que en su plan de contingencia ya lleva un 30 por ciento construido, comience a ser realidad”.

En agosto próximo, los 40 usuarios que hoy se encuentra en cuarentena en la actual Hospedería de Osorno, cruzarán la calle para habitar un renovado edificio a la espera de su hogar definitivo, que se comenzará a construir sobre los cimientos de la vieja Hospedería desalojada. “Estoy como perro con dos colas. Lo que nos ha demostrado la experiencia de otras hospederías nuevas y con mejores estándares, es que la gente que las reside está más feliz y más dispuesta a generar nuevos proyectos de vida, eso es lo que nos mueve”, cierra Yerko.

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