Dic
2018
“No más violencia” gana concurso de cortometrajes de Hogar de Cristo
Este miércoles 19 de diciembre, en la Fundación Cultural de Providencia, Hogar de Cristo realizó la premiación a los participantes del primer concurso de cortometrajes XX-S, que en esta versión se centró en temáticas dirigidas a la mujer. Participaron en la convocatoria casi un centenar de obras de diversas universidades de carreras afines y aficionados a las cámaras y los guiones.
Por Mauricio Bascuñán A.
En la ceremonia, a la que asistieron los seleccionados y sus familias, cineastas, docentes de universidades ligadas al mundo audiovisual, representantes de Hogar de Cristo, como el capellán general José Yuraszeck sj., la directora de comunicaciones, Claudia Gómez, y la periodista cultural Rosario Mena, más parte del jurado que premió las obras, como: la representante de la Fundación Cultural de Providencia, Francisca Rivera y la realizadora audiovisual Melisa Miranda. Justo antes de entregar los galardones se pudo apreciar el documental “Los locos no se ocultan”, de Francisco Bouza, que retrata la vulnerabilidad de las villas y la unión de las comunidades del país trasandino a través de la música.
El capellán de Hogar de Cristo agradeció la participación de los jóvenes en el concurso y destacó que lo fundamental de esta primera versión fue resaltar historias y problemáticas de la mujer del siglo XXI, en un momento en que el rol, derechos y participación femenina han adquirido mayor importancia en la sociedad: “Chile ha cambiado y el Hogar de Cristo también. Hacemos un llamado a que el país debe moverse hacia una sociedad más justa, igualitaria e inclusiva para todos, especialmente las mujeres, un rostro actual de la exclusión”.
La mención honrosa fue para “Bonita”, realizado en Concepción por los estudiantes de medicina Carlos Ramírez y Mariana Espinoza, una historia que impacta y que trata de una joven y vulnerada que no es escuchada ni por sus cercanos ni la sociedad, y al pasar los años cae en el mundo del consumo problemático y la prostitución: “Nuestra historia, esperamos que sirva para no ignorar a quienes se nos cruzan por el camino”, sentenció la creadora y protagonista de la obra.
El cortometraje ganador de la jornada fue “No más violencia”, de Matías Aroca, quien afirmó que jamás creyó que su obra sería seleccionada entre las finalistas. “Como no sabía cómo eran los cortos de la competencia, no tenía mucha idea si iba a quedar entre los finalistas”, señaló en la premiación. Aroca triunfó con un proyecto que buscaba concientizar sobre los peligros de la violencia y demoró dos días entre la grabación y la post producción. Su intención fue que su obra se notara “lo más real posible”, destacando el aporte de la protagonista en la realización. “Durante el rodaje tuvimos siempre retroalimentación para que no se notara falso. Ella se metió en el personaje y lo hizo, así que estoy feliz”.
El primer ganador del concurso de cortometrajes XX-S valoró las demás realizaciones de la competencia y destacó que verlas le ayudará a aprender nuevas técnicas de grabación. “Si los realizadores y estudiantes trabajamos juntos, podremos resaltar este y otro tipo de temáticas para que lleguen año a año a una mayor cantidad obras. Estas instancias son súper buenas”. El triunfador de la primera versión recalcó que las mujeres deben tener la fuerza para detener insultos y golpes. El verdadero compromiso debe estar al interior de las personas violentadas.
“Animo a los jóvenes a sumarse en este tipo de iniciativas. Vi los trabajos de los demás y me sorprendieron muchísimo, son obras magníficas. Si ellos hubieses dudado, se habrían perdido una gran cantidad de historias”, finalizó el joven.
Mariana Soto y Pía Molina, estudiantes de la Universidad Santo Tomás, creadoras de “Ana”, sorprendidas con su segundo lugar, manifestaron también que este tipo de concursos, sobre todo de fundaciones especializadas en la superación de la pobreza y promovedores de la justicia social, realza las creaciones y motiva a seguir presentando buenos relatos. Contaron que su guion partió de una historia verídica que mutó en lo que luego se vio en el Centro Cultural de Providencia. “Nuestro corto era contar un trozo de la vida de una mujer adulto mayor abandonada por su familia y la sociedad”, mencionó Soto, directora del corto.
Por su parte la montajista, Pía Molina expresó que el factor fundamental en su obra era darle una personalidad propia, “que reflejara la rutina de una mujer mayor en soledad”. Ambas agradecieron especialmente a su profesora Valeria Hernández y la jurado del concurso de cortometrajes, Melisa Miranda, quien apoyo en la post producción de los finalistas.
“Las obras que apreciamos son de mucha sensibilidad y denuncia, manejadas con gran sutileza. En todas vimos que se podían inferir varias lecturas del guion, también manejados con mucha potencia y conmovedoras a la vez”, concluyó la actriz Olga Matte, maestra de ceremonia en la premiación, quien recalcó que los jóvenes sí están en busca de problemáticas que la sociedad aún no ha resuelto.
Aquí puedes ver “No más violencia” y los demás cortometrajes premiados por Hogar de Cristo. Pincha aquí.