Dic
2017
Mary Maloney: “Los chilenos son emprendedores, venden de todo”
“Los chilenos pueden tener un trabajo, pero siempre están buscando otra forma de generar mayores recursos para superarse. Pueden vender chocolates, joyas u otras cosas en sus oficinas. Ese espíritu de superación está muy potente en las personas en situación de calle en Chile”, comenta Mary Maloney (25), la ‘gringa’ que trabaja en el área de vinculación con el medio de Fundación Emplea.
Por Edgardo Urritia
Hace cerca de 8 meses, Mary se despidió de su familia y tomó sus maletas, dejando atrás la ciudad de Washington, en Estados Unidos, e iniciar una nueva aventura. Así llegó a Chile, tras lo cual arribó a las oficinas de Fundación Emplea, que se dedica a la reinserción laboral. “Llegué un domingo y un martes ya estaba sentada en mi oficina, afinando detalles de planes pilotos para trabajar con migrantes en Chile. Este trabajo me ha llenado de energía y me ha permitido conocer realidades ocultas para muchos y también la maravillosa labor del Hogar de Cristo”, afirma.
-¿Existe algo similar al Hogar de Cristo en EE.UU?
–La verdad es que no hay nada parecido y tan potente como el Hogar de Cristo. Hay muchas oenegés que trabajan para superar la pobreza, porque a diferencia de lo que uno piensa en Estados Unidos hay mucha pobreza, pero está oculta bajo la sombra de la grandeza del país. Yo trabajé en una que quedaba a dos cuadras del Capitolio y, literalmente, la sombra que generaba ese gran edificio tapaba a otro, en donde nosotros entregábamos comida, duchas y capacitaciones a personas en situación de calle. Por eso me siento muy motivada a trabajar en un país, donde la gente lucha por salir adelante, mostrando las realidades. Llegué a Chile justo en el apogeo del movimiento estudiantil y me encantó sentir el espíritu de la gente que lucha por más. Los chilenos son súper emprendedores, de un trabajo generan otro para tener más recursos. Pueden vender chocolates, joyas y cosas así en sus oficinas mientras trabajan y es algo que no se da en todos los países. Ese espíritu de superación es lo que me motiva acá en Emplea.
El vínculo con Latinoamérica
La joven recuerda el momento en que decidió instalarse en Chile. “Estudié Estudios Latinoamericanos y Español y durante mi pregrado hice un intercambio en Viña del Mar y ahí me encanto el país, la gente, las buenas vibras. Esos 4 meses fueron todo un aprendizaje y eso me abrió la mente a que Latinoamérica era lo que yo quería estudiar y dedicar mi vida para trabajar por los latinos. Tras ese periodo, realicé mi maestría en Estados Unidos en Estudios Latinoamericanos con una concentración en Derechos Humanos y Resolución de Conflictos, donde tuve la oportunidad de estudiar con muchos latinos, lo que me hizo decidir por venir a trabajar acá. Chile siempre estuvo en mi mente.
-¿Te sientes una migrante?
-Ese es un tema súper interesante. Mi país está construido por migrantes y acá la diversidad cultural es menor que en Estados Unidos. Cuando llegué a Chile no vi a mucha gente de distintos colores, no había diversidad de comidas, entre otras cosas, eso me llamó la atención. Acá este tema recién está llegando y a muchos le causa recelo. Para mí la diversidad cultural es súper positiva, me encanta ser migrante. Hice todo el proceso en Extranjería, en el Registro Civil, en la PDI, donde tuve la oportunidad de hacer filas con los migrantes. Mucha gente cree que los migrantes vienen a robar el trabajo a los chilenos, pero la verdad no es así, todos somos un aporte a los países que llegamos.
En cuanto a la discriminación, la joven estadounidense asegura que “nunca me he sentido discriminada por ser de Estados Unidos, pero sí lo veo con los haitianos acá todos los días. La discriminación que sienten ellos es tangible, en términos de los trabajos a los que pueden acceder, a la vivienda. Yo nunca he tenido ese tipo de problemas, sin embargo, aún no me siento un chileno más, porque en la calle siempre te están mirando”.
Ante esta realidad, Mary destaca el trabajo del Hogar de Cristo con todas sus fundaciones. “Es maravilloso esa búsqueda de evitar el atropello de los derechos de las personas, la búsqueda por ayudarlas a salir de la pobreza y todas esas causas maravillosas que realizan, sólo me hace pensar que estoy en el mejor lugar del mundo y donde siempre quise estar”.
¡Hagamos una vaca!
El tema cultura es siempre un atractivo. El llegar a un país, el lenguaje y la interacción con las personas es fundamental. Mary recuerda su llegada a Chile y las anécdotas con el lenguaje y los modismos; hechos que fueron –a su juicio- confirmando el cariño y la decisión de querer instalarse en Chile.
“Una vez mi equipo de trabajo me planteó la idea de hacer una vaca para ir en ayuda de alguien o ir a comer no recuerdo bien. Yo no entendía por qué un grupo de personas quería armar una vaca a gran escala y me imaginaba algo de metal. Luego entendí que era una recaudación de fondos”, recuerda entre risas.
Cachaí, altiro o sipoh son solo algunos de los modismos que utilizamos los chilenos a diario y que han llevado a Mary a que “muchas veces no entienda o quede en vergüenza por mi ignorancia”. Sin embargo, destaca el cariño de los chilenos. “Acá, en el Hogar, es impresionante. Desde la mañana, todos te saludan, te besan y te abrazan. Eso no se ve en las oficinas o lugares de trabajo de otros países. Los chilenos llevan el liderazgo en las personas amables y cariñosas”.
-¿Qué te parece el mundo de Emplea?
–Nosotros en Emplea tratamos de impulsar la inclusión laboral, trabajamos con casi toda la población del Hogar: migrantes, personas en situación de calle, personas con consumo problemático, jóvenes, adultos mayores y personas con discapacidad. Ha sido una bonita experiencia conocer todos esos mundos distintos y he aprendido muchas estadísticas muy chocantes de cosas que tienen que cambiar sí o sí.
Mary ahonda sobre las nuevas políticas de migración planteadas por el gobierno de Estados Unidos y que han generado polémica y rechazo en muchos países. De acuerdo a la joven, las políticas impuestas por Donald Trump son catalogadas un “retroceso, en especial sus ideas de expulsar migrantes y construir muros”.
Mary cree que “los migrantes contribuyen mucho a los países en una manera dinámica y positiva y hacen trabajos súper necesarios. Ojalá en Chile comiencen a reconocer este aporte, para así respetar sus derechos y mejorar su calidad de vida. Estas simples acciones llevarán a que todos contribuyamos a un mundo mejor”.