La empresa de seguridad industrial y protección personal realizó una significativa donación para el cuidado de las personas que acoge la fundación. Para dimensionar el gesto, basta decir que contar con este elemento de seguridad sanitaria esencial en todos nuestros programas residenciales cuesta 22. 328.960 millones al mes, lo que nos está generando un déficit presupuestario sideral.

Por María Luisa Galán.

Desde que llegó el Covid-19 a Chile, en marzo, el Hogar de Cristo ha implementado estrictas medidas sanitarias en sus programas residenciales que atienden a 4.500 adultos mayores, hombres y mujeres con discapacidad mental, personas en situación de calle, todos pertenecientes a la población de mayor riesgo frente al coronavirus. A raíz de estos protocolos, la fundación incrementó exponencialmente sus gastos y hasta que no exista vacuna, esta estrategia de cuidado continuará durante el 2021, siendo entonces necesario el aporte del mundo público y privado, aunque, en rigor, debería ser responsabilidad del Estado.

Es por ello que Hogar de Cristo recibe con alegría el aporte de 20 mil mascarillas de triple pliegue y 800 protectores faciales con cuatro láminas de reemplazo cada uno, por parte de la empresa GSP Chile, dedicada a la seguridad industrial y personal. Sin duda, una gran y necesaria donación en estos atribulados días de pandemia. “Desde la creación de nuestra empresa, el año 2011, siempre hemos apoyado a organizaciones que requieren algún tipo de ayuda. Y queremos continuar con esto porque entendemos que es algo necesario, es una responsabilidad de las empresas colaborar con las entidades que no tienen los recursos necesarios, por eso GSP Chile se quiso hacer presente con el Hogar de Cristo”, contó Francisco de Pablo, product manager de la empresa.

El representante de GSP Chile, agregó: “Este es un nuestro primer grano de arena, esperamos poder seguir aportando en lo que sea necesario. Nuestro rubro es comercialización de elementos de protección personal y ropa de trabajo y, en este caso, con la donación de las mascarillas desechables creemos que podemos apoyar, entendiendo que es un producto necesario y obligatorio para ustedes que trabajan con adultos”.

La solidaridad de los privados ha sido vital en estos días de pandemia, ayudando a disminuir en parte el gasto que ha incurrido la organización en insumos médicos. Por ello, Juan Cristóbal Romero, director ejecutivo de Hogar de Cristo, agradece este importante aporte. “La fundación está con una creciente necesidad de equipamiento de protección personal durante todo el 2020 y lo vamos a seguir teniendo el 2021, para lo cual donaciones como la de GSP Chile es vital para mantener la protección de las personas que están siendo cuidadas por el Hogar de Cristo. Hoy tenemos 4.500 personas en residencias y hospederías para cuyo cuidado es indispensable el equipamiento como el que hoy nos están aportando”.

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