Cinco jóvenes serán la banda encargada de amenizar con sus ritmos y melodías la visita del Papa Francisco al Santuario de Padre Hurtado. A través de sus talentos, el grupo busca transmitir un mensaje evangelizador  a todos los rincones con letras claras y directas.

Suena a contrasentido: una banda de rock católica, que más que provocar con sus letras y su ritmo, busca aportar con contenido valórico y melodías optimistas y energéticas. Eso es Servicentro, grupo integrado por 5 jóvenes que se reunieron el año 2011 para transformarse en un punto de encuentro en el camino de la vida, dejando un mensaje.

Por Edgardo Urrutia

Ellos serán uno de los números musicales con que se animará quienes quieran estar cerca del Papa en su visita al Santuario del Padre Hurtado y en una de esas divisarlo cuando visite a sus hermanos jesuitas y a los acogidos del Hogar de Cristo en lo que se ha llamado “El Encuentro con el Cristo Pobre”.

Eduardo Rigall, líder y bajista; Constanza Castro, vocalista y guitarrista; Daniela Pozo, tecladista; Rafael Cereceda, baterista y Mauricio Pino, guitarrista, son los miembros de Servicentro. Se conocieron en un coro de iglesia y desde entonces se hicieron amigos en torno a la música, compatibilizándola con el ejercicio de sus profesiones de ingeniería, diseño, medicina y veterinaria.

“Todo nace del deseo de tocar otro estilo de música. Eduardo, que es diseñador, tenía hace algunos años la idea de formar una banda de rock con sentido, con música para la calle y no para la iglesia propiamente tal”, comenta Rafael, quien también actúa como manager del grupo.

Eduardo explica que las letras de sus canciones abordan situaciones de la vida cotidiana con una mirada católica. “A veces el mensaje va a ser explícito y otras no, pero siempre con un sonido lleno de energía, que te puede acompañar en cualquier lugar. Es como una la letra chica, pero a través del rock”, sostiene el líder, compositor y bajista de Servicentro.

Llevan más de 5 años tocando juntos, periodo tras el cual han generado mucho material propio, con varias canciones y videos en YouTube. El éxito de su música los ha llevado a recorrer distintos lugares de Chile y el extranjero. Y ahora, a sólo días de la visita Papal a nuestro país, se preparan y ensayan a full para tocar para los fieles del Papa Francisco frente al Santuario del Padre Hurtado.

Sacar la Iglesia a la calle y a la vida cotidiana es el objetivo de Constanza, quien reconoce que los tiempos han cambiado y que “los católicos no van mucho a la iglesia y los que vamos nos sentimos un poco perseguidos por todas las cosas malas que han pasado”.

“Queremos entregar un mensaje, a través de todos los medios. Salimos del edificio de la iglesia para llegar a una  mayor cantidad de público con letras que cuentan hechos de la vida cotidiana”, afirma.

Orgullosos, así se sienten de haber sido escogidos para la previa de la visita del Papa al Santuario. “Inicialmente nos invitaron a participar con una de nuestras canciones para que fuera el himno oficial del evento, pero no fuimos escogidos. Sin embargo, nos contactaron para ser parte de este evento, con lo que nos sentimos premiados”, comenta Rafael.

La noticia fue recibida con emoción como una clara oportunidad de dar a conocer su mensaje. “Tocar nuestras canciones para tanta gente no tiene precio. Además, en un evento donde va la gente a ver al Papa, a escuchar su mensaje. Eso es lo mismo que nosotros queremos hacer: entregar un mensaje, pero a través de la música”, agrega.

Constanza, entre risas, recuerda el momento en que se enteró de la invitación. “Estaba en el colegio y le conté a todos. La directora me abrazaba y algunas ‘profes’, que son más católicas, me tocaban y me decían que casi era una bendecida”.