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Jun

2019

Personalidades se convirtieron en nuevos activistas por la pobreza

El intenso frío de la noche no fue suficiente para congelar el entusiasmo de personalidades del mundo político, del estado, de la empresa, del arte, la cultura y la entretención que se sumaron a una ruta calle del Hogar de Cristo en torno a la noche más larga. Este es un resumen de lo que vivieron.

Por Comunicaciones Hogar de Cristo

Puntualmente llegaron más de 30 figuras y líderes que quisieron conocer de cerca la realidad que viven en pleno invierno las personas en situación de calle que acoge el Hogar de Cristo, y que representan la cara más cruda de la pobreza y exclusión social. El capellán general, José Francisco Yuraszeck S.J, fue el primero en invitarlos a convertirse en #ActivistaPorLaPobreza, lo que significa preocuparse especialmente de visibilizar en todo su círculo de amistades, familias y trabajo, la experiencia que estaban por vivir.

Premunidos de café, abrigo y gestos de cariño, participaron en esta actividad en torno a la noche más larga que cada año organiza la causa de Alberto Hurtado: el recién nombrado ministro de Desarrollo Social y Familia, Sebastián Sichel, y el subsecretario de esa cartera, Sebastián Villarreal; el presidente del directorio de Metro, Louis de Grange, el presidente de SOFOFA, Bernardo Larraín, Ignacio Yarur, gerente de Bci,  José Pablo Arellano, presidente del directorio de Hogar de Cristo y el empresario Fernando Echeverría; los diputados Boris Barrera, Gonzalo Winter, Natalia Castillo y Pablo Vidal; los artistas Concepción Balmes y Andrés Hermosilla; figuras de la televisión como Eduardo de la Iglesia, Peter Murphy, la influencer Kel Calderón y el cantante de Rojo, Benjamín Durán, entre otras personalidades.

Uno a uno se fueron subiendo a los vehículos que los llevarían a recorrer las calles donde pernoctan cada noche las miles de personas en situación de calle en distintos lugares de Santiago y las comunas de Pudahuel, Lo Prado, Quinta Normal, Independencia, Pedro Aguirre Cerda, Lo Espejo, San Miguel y San Joaquín.

Allí conocieron las historias de dolor y marginación de Luis Ortiz, quien llegó de la Aracaunía hace tres días y duerme en las afueras del Teatro Municipal; de Pedro Quevedo, conocido como Liro Liro, que trabajó en una minera del norte; de Pedro Pablo, quien dejó su casa a los 14 años y lleva varias décadas en calle; de Francisco, ex chofer de micro, de Cristián Fernández; de Guido Zanny, con 10 años en situación de calle, de Lidia del Carmen, Rosa y su amiga Solange, de Juan quien dijo: “Somos mendigos, pero además de comida y ropa, necesitamos conversar”,  sólo por mencionar algunos de quienes fueron visitados esa noche en sus rucos o sencillamente con nada más que el frío suelo de cemento como colchón.

UNA REALIDAD QUE ES POSIBLE CAMBIAR

Estas fueron las impresiones que dejó la jornada en voz de sus participantes.

Sebastián Sichel, ministro de Desarrollo Social y Familia: “Tenemos un desafío gigante que es hacer visible lo que hoy día es invisible, especialmente ahora que comienza el invierno en que se hace más urgente activar la solidaridad de los chilenos. Aquí estamos viendo gente que está pasando mucho frío, que ha armado su estilo de vida, sus rucos y cuesta mucho sacarlos de allí, por eso tenemos que acompañarlos y ojalá llevarlos a los refugios que se activan con el código azul y sobre todo dar cariño y afecto a la gente que hoy lo necesita más que nadie”.

Sebastián Villarreal, subsecretario de ministerio de Desarrollo Social y Familia: “Participar en una ruta calle siempre trae aprendizajes. En el grupo que me tocó fue distinto, había parlamentarios, del gobierno, del equipo de Hogar de Cristo, todos trabajando por la realidad de las personas en situación de calle. Las diferencias que hay en otros planos de la vida, en estos contextos se anulan y nos movilizamos por las personas en situación de calle. Gran experiencia y agradezco a Hogar de Cristo que nos acerquen a la realidad. Vimos realidades muy duras, como una pareja que vivía en un sitio eriazo y prontamente será reubicada a otro sector. El programa Viviendo Primero es un cambio paradigmático para lo que todos veníamos haciendo. Es una oportunidad en dignidad y justicia, para avanzar en la superación de la situación de calle. Poner el techo primero y generar una estructura de apoyo, va a ser mucho más exitoso que otros ejercicios que veníamos haciendo”.

Louis de Grange, presidente de directorio de Metro S.A.: “Había participado antes en iniciativas similares muchos años atrás, pero hacía tiempo que no me sumaba y recordaba lo duro que es vivir en situación de calle para muchas personas, son cerca de cinco mil sólo en Santiago. La verdad es que en el día a día, en el trabajo, en la familia, uno se olvida de esta realidad que muchas veces o no conocemos, o no queremos ver y, por lo tanto, esta es una oportunidad para recordar lo que sufre mucha gente y lo que podemos hacer nosotros para que pueda mejorar un poquito su condición”.

Ignacio Yarur, gerente de transformación digital e innovación de Bci: “A mí me ha parecido una experiencia maravillosa porque detrás de cada persona que hoy día pude visitar en la calle, me di cuenta  que hay una historia con la cual uno puede empatizar, hay historias muy lindas de amor, de sacrificio, de pena, de alegría y eso nos sirve a todos para romper prejuicios que tenemos y ver que esas personas con un poco de cariño y tiempo que uno le destine, puede hacer una bonita diferencia”.

Diputado Pablo Vidal (RD): “Es primera vez que acompaño al Hogar de Cristo. Esta es una realidad que todos sabemos que está ocurriendo, cuando estamos calentitos en nuestras casas, sabemos que hay gente que no está igual. Es distinto saberlo que vivirlo y conversar con esas personas. Esta realidad nos pega una cachetada y nos recuerda lo difícil que es vivir en la calle”.

Alberto Ferrán, gerente general panadería San Camilo: “Primera vez que hago ruta calle. Es distinto ver todos los días gente en la calle que bajarse del auto a conversar con ella, saber su nombre, su historia, las razones de su actual situación y cuáles son sus sueños, sus problemas, sus esperanzas. Es distinto oírlo y creo que eso tiene mucho valor”.

Belén Calvo, directora en Apemec -Asociación de Pequeñas y Medianas Centrales Hidroeléctricas: “Fue impresionante escuchar el testimonio de uno de ellos y lo agradecido que estaba de la vida y el lugar que tenía para vivir junto a un par de amigos y por eso se sentía afortunado”.

Claudio Seebach, presidente ejecutivo de la Asociación de Generadoras de Chile: “Agradezco al Hogar de Cristo por la oportunidad de vivir esta experiencia en pleno invierno y poder conectarme con la realidad que viven miles de personas en situación de calle. Ellos te enseñan a parar y escuchar y te dan la posibilidad de preocuparnos de los demás. Espero que hayan cada vez más activistas por la pobreza en este país, para poder generar un cambio”.

Claudio Storm, socio de Nexos: “Tuvimos la suerte de ir a la ruta de calle con un grupo muy bueno del Hogar de Cristo. De hecho nuestro guía nos fue mostrando los lugares que él a menudo recorre, donde pudimos compartir y conversar con personas en situación de calle y eso hizo que viviéramos un momento muy especial y profundo. Por ello, recomiendo vivir esta experiencia porque permite conocer realidades que uno se las imagina, pero es muy distinto estar ahí y tomarse un café con alguien que vive en la calle, eso es algo que marca mucho”.

Peter Murphy, conductor del programa “Aquí te las traigo Peter” (TVN): “Me impactó que una persona que no tenía cama, ventanas ni calefacción le pidiera al capellán del Hogar de Cristo rezar  por los que tenían menos que él. Él se estaba calentando con leña entre varios amigos y aún así, pedía por otros. Aprendo mucho más de las personas vulnerables que de los libros o de personas del mismo nivel intelectual que yo. Me quedo con el sentimiento de que hay que hacer esto con más frecuencia”.

Kel Calderón, influencer y youtuber: “Es la primera vez que hago una ruta de calle y estoy muy agradecida por la invitación. Fue súper bonito, pero muy fuerte a la vez. También me impresiona la desinformación, ya que uno piensa que son mucho menos personas las que viven en situación de calle, pero es impresionante darte cuenta de lo contrario cuando el Hogar de Cristo te muestra las estadísticas. Es muy violento saber eso y para uno como parte de una sociedad que debiese hacerse responsable de esta situación. Uno se siente culpable también ya que por la rutina del día a día y porque anda preocupado de tonteras, te olvidas de esto. Es primera vez que me toca conversar con ellos y ver que tienen nombre, edad, su historia y ponerle cara es distinto. Me marcaron mucho doña Carmen, don Guido, don Carlos y don Sergio a quienes me gustaría seguir viéndolos más adelante. Obviamente hay mucho que hacer, pero creo que involucrándose con los casos que uno va conociendo se puede aportar un granito de arena… nuestro rol es súper pequeño pero ayuda a visibilizar la pega del Hogar de Cristo”.

Eduardo de la Iglesia, conductor del matinal de La Red: “Me duele pensar que vivimos en un país que a través de una autopista tiene mundos tan distintos. Una persona que vive a la intemperie a dos grados bajo cero, mientras otra está con calefacción central en su casa. Esa brecha tenemos que tratar de hacerla desaparecer o achicarla de manera urgente. Se nos está muriendo la gente de frío y eso hay que cambiarlo”.

Finalmente, Paulo Egenau, el director social nacional del Hogar de Cristo, en sus palabras de cierre de la jornada recalcó: “Esta noche nos encontramos con personas en situación de calle muy heterogéneas. Cambiar esta realidad es una tarea absolutamente abordable. La situación de calle es posible revertirla, y esa es una de las razones de convocar a un grupo tan heterogéneo, pero estamos todos unidos por los más pobres que merecen una respuesta y un sentido de urgencia colectivo para resolver la problemática de las personas en situación de calle. Junto al Ministerio de Desarrollo Social venimos implementando Vivienda Primero, y cambiamos el paradigma de lo que hemos venido haciendo en las últimas décadas. Antes les pedíamos capacidad, demostrar habilidades, dejar de lado conductas de riesgo para acceder a una vivienda definitiva. La evidencia nos ha demostrado todo lo contrario, para cambiar hábitos y retos, debemos garantizar la vivienda, como piso fundamental”.

“Este no es un problema del invierno, de la noche más larga ni del Código Azul porque la temperatura baja a niveles bajo cero, es un problema cotidiano que viven miles de seres humanos en nuestro país”.

La invitación a ser #ActivistaPorLaPobreza del Hogar de Cristo queda abierta, es para todos y para cada día, “porque la realidad es peor a todo lo que puedes imaginar”.

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Fotos de: Agencia Blackout, Fernando Ramírez (@fotografoencampana), Julio Vidal, Camila Toro