Abr
2021
Pamela Garcés y la “ollatón” de Temuco: “Cuando la gente se une pasan cosas maravillosas”
Partió en un grupo de ayuda a jóvenes en riesgo social en La Araucanía. Esa experiencia la llevó a trabajar en la red asistencial para personas con VIH, Antu Mawida, en Temuco, consiguiendo medicamentos, apoyo y visitando a niños que viven con SIDA. Ahora, en pandemia, recolecta alimento para familias en campamentos, y anuncia una gran “ollatón”.
Por Matías Concha P.
El número de familias que viven en asentamientos informales en la Región de La Araucanía desde el año 2020 se ha incrementado de manera alarmante; el pasado febrero, el Ministerio de Vivienda cifró los asentamientos de la región en 48 tomas de terreno donde viven 1.927 familias. Una realidad que llevó a la asistente social, Pamela Garcés (39) a crear un proyecto que entrega desayunos a los niños de los campamentos más vulnerables de Temuco. “Es muy emocionante, porque los niños nos esperan en la puerta para tener su comida, nos ubican, nos quieren”, dice.
Pamela explica que el proyecto se inició a finales de 2020 cuando 300 niños de sectores de Pedro de Valdivia, Amanecer, Villa Los Ríos, San Antonio, Pueblo Nuevo, localidades ubicadas en los alrededores de Temuco, quedaron sin alimentación garantizada por parte de Junta Nacional de Auxilio Escolar y Becas (JUNAEB), debido al término del año escolar. “Eso nos llevó a postular el proyecto al Hogar de Cristo, quien creyó en nosotros y nos entregó recursos para ayudar a las familias. Vimos que había muchos niños de distintos sectores que estaban pasando su primera comida como almuerzo, ya a la una o dos de la tarde y esto no puede ser, que un niño tenga que esperar tanto para comer algo, cuando el desayuno es primordial para ellos”, explica la trabajadora social.
A través de múltiples redes de apoyo, como dirigentas sociales de los mismos campamentos, han logrado llegar a los niños, entregándoles desayunos en centros de distribución o en sus propios hogares. “Es la primera comida de los niños. Una ayuda que va a agradecer aquel pequeño que no va a tener que esperar hasta las dos o tres de la tarde para tomar algo de leche”.
En el Catastro Nacional de Campamentos 2020-2021 publicado por TECHO-Chile y Fundación Vivienda (FV) se evidencia en cifras lo anteriormente expuesto: 81.643 familias habitan en 969 campamentos en el país en un número total histórico, que es el más alto desde el año 1996. Para La Araucanía, el estudio arrojó un aumento del 315,38% en la cantidad de familias y un 128,57% en el número de campamentos.
-¿Cómo se vive la pandemia en los campamentos?
–Para nadie es una novedad la cantidad de campamentos que han surgido en Temuco. Cuestión que se ha querido impedir, ocultar, pero no solucionar. Al final, son los más vulnerables, los niños, quienes sufren las consecuencias. La mayoría de las familias no tiene acceso al agua, un hecho sin precedentes frente a una pandemia que nos obliga a lavarnos las manos lo más seguido que se pueda.
-¿Quiénes están intentado ayudar?
–Este movimiento es de pobladores y pobladoras, nosotros no hemos recibido ayuda de ningún municipio o de políticos, solamente del Hogar de Cristo y de otras personas que de forma anónima han ayudado. Aquí nadie se ha preocupado de los niños. Por eso, como pobladores tomamos el sartén por el mango y buscamos redes de apoyo para paliar el hambre.
La solución ha sido Autogestionada, sin colores políticos y con mucho espíritu: las ollas comunes , que han vuelto a aparecer en Temuco y que ahora se están reorganizando para afrontar el invierno”, asegura Pamela.
-¿Cómo han enfrentado la crisis alimentaria?
-Hoy sigue siendo la comunidad la que más se ha movilizado para enfrentar el hambre. Por eso vamos a realizar un evento el 30 de abril, y el 1 y el 2 de mayo, en vinculación con varias organizaciones sociales, para llevar a cabo una “Ollatón” en Temuco. Es para poder llegar con alimento a todas las ollas comunes del territorio, que alimentan a cerca de 5 mil personas. Es que cuando la gente se une pasan cosas maravillosas.