Un gesto de humildad tradicional, el lavado de pies, y otro de comunión y participación, compartir el pan, fueron parte central de inicio de las celebraciones pascuales en el Hogar de Cristo. Lee aquí los detalles.

Por Daniela Calderón P.

Acogidos, trabajadores y vecinos se reunieron en las afueras del Hogar Abierto de Estación Central para adultos mayores para iniciar con la ceremonia del lavado de pies la Semana Santa.

Como una forma de unir a la comunidad en torno a la celebración de Semana Santa, alrededor de 90 acogidos de nuestro Hogar Abierto para Adultos Mayores de Estación Central participaron de la tradicional ceremonia del lavado de pies junto a vecinos y trabajadores.

La actividad, liderada por nuestro capellán José Francisco Yuraszeck estuvo marcada por el homenaje al querido jesuita Jorge Díaz, quien murió sorpresivamente en Arica a causa de un infarto al corazón. El sacerdote había sido destinado a la Primera Región como capellán de Bailes Religiosos de la Compañía de Jesús.

Al finalizar la ceremonia, los asistentes compartieron un trozo de pan elaborado por un grupo de adultos mayores del Hogar Abierto, que participan de un taller de amasandería. “El único secreto para hacer pan es que hacerlo con cariño”, dijo Jorge Piña, uno de los encargados del taller, que lleva tres años como acogido de Hogar de Cristo.

Esta actividad se enmarca dentro de las celebraciones que todos los programas sociales de Hogar de Cristo han realizado a lo largo del país para involucrar a la comunidad en la lucha por un país más digno, justo y solidario.