Equipos de las regiones de Valparaíso, Biobío y Metropolitana de las hospederías del Hogar de Cristo participaron de una jornada de cuidados paliativos organizada y ejecutada por profesionales de la Universidad Católica. “Estos cuidados toman a las personas en una etapa de sus vidas en las que tienen más necesidades físicas, sicológicas, espirituales y sociales”.

Por María Luisa Galán

El caso de un hombre con cáncer a la vesícula que no quería contarle a su familia, otro de un adulto mayor con cáncer a la próstata y fractura lumbar, un sacerdote con tantos dolores que pedía la eutanasia, una mujer en situación de calle con un tumor en el colon y, por último, un hombre de 48 años con cáncer gástrico, desilusionado de Dios. Todos estas situaciones verídicas fueron analizadas por los equipos técnicos y profesionales que trabajan en las hospederías con salas de cuidados especiales de Villa Alemana, Hualpén, Nos y Recoleta, quienes asistieron a la Jornada de Cuidados Paliativos realizada por la Facultad de Medicina de la Universidad Católica para el Hogar de Cristo.

Los cuidados paliativos buscan ayudar a las personas con alguna enfermedad grave a sentirse mejor, con el objetivo de prevenir síntomas o efectos secundarios. “Este cuidado mira a la persona enferma que tiene estas necesidades de forma multidimensional, en equipos que deberían ser interdisciplinarios de tal manera que las soluciones o respuestas que se den sean integrales”, dice el geriatra Eduardo Valenzuela, académico de la Universidad Católica y colaborador del Hogar de Cristo.

Los equipos del Hogar de Cristo participaron de charlas y trabajos en grupo con el objetivo de actualizar sus conocimientos en la materia. “Queremos llevar a las residencias una mirada distinta de los cuidados de fin de vida. Lo hacemos desde hace muchos años, pero queríamos homologar e inyectar nuevos conocimientos a los cuidadores”, cuenta Doris García, Jefa Técnica de Adulto Mayor de la fundación del Padre Hurtado.

El doctor Valenzuela agrega: “Lo que se trató de transmitir esta mañana es que los cuidados paliativos son una forma de mirar a las personas en una etapa de sus vidas en las que tienen más necesidades de todo tipo, físicas, psicológicas, espirituales, sociales. Por lo tanto cualquier persona que tenga capacitación en esta materia, no necesariamente un médico, y que esté cercana a estos pacientes, puede tener este enfoque y ayudar a las personas en esta etapa”.

Los cuidados paliativos se pueden dar a personas con enfermedades oncológicas, insuficiencias cardiacas, renales o respiratorias o cualquier patología que disminuya de forma importante la funcionalidad de la persona. “Estos cuidados aparecen cuando hay sufrimientos que tienen la necesidad de ser mitigados, apoyados y ojalá eliminados. Es ideal  que partan mucho antes de que la persona esté en situación de fin de vida. Cuando están en esta condición, llegamos tarde y esta persona podría morir muy sola”, afirma el doctor Eduardo Valenzuela.

A la ceremonia de inauguración del taller asistieron el Decano de la Facultad de Medicina de la Universidad Católica, Felipe Heusser, el director ejecutivo del Hogar de Cristo, Juan Cristóbal Romero, la directora de apoyo, cuidado y desarrollo de la autonomía del Hogar de Cristo, María Isabel Robles. Como relatores estuvieron el doctor Eduardo Valenzuela y el médico internista Armando Maldonado, profesor asistente del equipo de Medicina Paliativa y Cuidados Continuos de la Universidad Católica.

“Nosotros como equipo paliativo siempre estamos dichosos y dispuestos de ayudar en la formación de profesionales y poder conversar de los conceptos que guían estos cuidados. Estoy muy contento con la participación del grupo, fue muy participativo y con harto compromiso. Espero que no sea la última instancia que podamos seguir haciendo más actividades”, contó al finalizar la jornada el doctor Maldonado.