Lo dijo una persona en situación de calle que participó en el Círculo Territorial de Calle, que realizamos en paralelo con Big Sleep Out, evento que se desarrolló en 50 ciudades del mundo. En cada una de ellas, centenares de personas durmieron a la intemperie para solidarizar y reinvindicar el derecho a la vivienda de las personas en calle.

Por María Teresa Villafrade

Fotografías: Julio Vidal

Will Smith, Helen Mirren y Chris Martin fueron los rostros internacionales que motivaron este 2019 la campaña World´s Big Sleep Out destinada a recaudar fondos y sensibilizar respecto a los 100 millones de personas que viven en el mundo en situación de calle y buscar fórmulas para terminar con esta cruda realidad.

En Chile, dada la crisis social del país, se realizó el evento, pero con otras características. Se invitó a personas en situación de calle a participar en un gran Círculo Territorial de Calle para levantar y visibilizar sus opiniones respecto al momento que vivimos y recoger sus propuestas para superarla.

Cerca de 100 participantes de los distintos programas del Hogar de Cristo y de otras fundaciones de la Red Calle a nivel nacional llegaron desde ciudades como Antofagasta, Coquimbo, Valparaíso, Biobío, Puerto Montt y de la Región Metropolitana para sumarse a esta iniciativa de carácter mundial.

En un gran panel con el mapa de Chile instalado en la explanada del Santuario Padre Alberto Hurtado se fueron plasmando las ideas que afloraron durante la jornada, en las que las palabras desigualdad, vivienda, salud e ingresos fueron las más empleadas.

Con la conducción de Luis Cuevas, Jefe de Operación Social del Hogar de Cristo en Concepción, se escucharon con atención distintos testimonios. Uno de ellos, Alberto, de la hospedería de nuestra fundación en Antofagasta, señaló que en el cabildo que ellos efectuaron, las bajas pensiones y sueldos, el abandono a la tercera edad, las AFP, fueron señaladas como las principales causas de este estallido del 18 de octubre.

“Los que estamos en situación de calle, no tenemos acceso a la salud y hay un alto costo de medicamentos, falta de oportunidades. Vengo de Antofagasta, una ciudad con un costo de vida muy caro. Hay que luchar por la gratuidad y la calidad de la educación, porque ahí comienza la desigualdad. Si buscamos un trabajo y damos como dirección la hospedería, no nos toman en cuenta, somos discriminados”.

Emerson, de Concepción, resumió que ellos eligieron tres causas para exponer en este gran Círculo: “La desigualdad, porque un jardinero gana 300 mil pesos y el político más mal pagado gana tres millones mensuales. Es un ejemplo nada más. En la salud, sufrimos falta de especialistas y la gente se muere esperando atención médica; y están los políticos, que no trabajan por el bien de todos sino por el de ellos nada más”.

Víctor, de Valparaíso, también enfatizó en la desigualdad tanto en la salud, empleo y educación. Pero además se refirió a un hecho dramático que padeció durante el estallido: “Yo venía del trabajo y me pilló el toque de queda y les mostré el papel que decía que yo vivía en un albergue por ser situación de calle, pero carabineros no me respetó y fui torturado, estuve dos días detenido y me trataron de lo peor. No quiero que nadie pase por eso”, contó.

“NO A ECHARLE LA CULPA A LOS DEMÁS”

Otro participante, Óscar, emocionó con sus palabras de unidad y solidaridad: “Tenemos que ser conscientes de que antes de esta crisis no nos habíamos unido, recién ahora venimos a juntar todas las causas en una sola para salir adelante. Nuestra juventud se la jugó por nosotros y nos hizo darnos cuenta que estábamos dormidos. La mayoría de las calles de las poblaciones tienen cemento, la mayoría de las casas tienen televisores de 52 pulgadas, incluso nosotros estando en calle, tenemos celulares, tenemos internet, tecnológicamente hablando tenemos recursos que antes eran inimaginables, ahora tenemos un computador en el bolsillo. Usemos esos recursos, no es el gobierno el único que puede hacer cosas, nosotros mismos tenemos las herramientas para comunicarnos y aprender entre nosotros. Recién ahora estamos usando las redes sociales para algo social. No nos limitemos a echarles la culpa a los demás sino cambiemos nuestras propias vidas, ayudemos al compañero cuando lo necesita. La mayoría somos gente de la calle porque nos abandonaron de una u otra forma, porque buscamos el camino fácil, ayudémonos a salir adelante a otros”.

Luis Cuevas recordó que en Concepción hay más de 500 personas en situación de calle y que cerca de 250 no tienen dónde dormir en las noches. En Santiago, se estima que son más de siete mil personas y en todo Chile, el Hogar de Cristo ha atendido a 15 mil a lo largo del año.

Para finalizar, después de recoger todas las propuestas, donde el derecho a la vivienda fue la más mencionada, un asistente al encuentro concluyó: “Estoy muy contento de participar porque a nosotros nunca nadie nos pide una opinión, somos tan invisibles que ni siquiera nuestra causa aparece en los carteles de las marchas de protesta, necesitamos vivienda antes que cualquier otra ayuda”.

Y tú, ¿qué esperas para sumarte a la causa de recuperar la dignidad de las personas más vulnerables?

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