Tanto el ministro (s) de Justicia y Derechos Humanos como la directora del Sename agradecieron a los parlamentarios por apoyar esta ley que busca mejorar el modelo residencial. Y así reaccionó Paulo Egenau, director social nacional del Hogar de Cristo.

Por Comunicaciones Hogar de Cristo

“Cuando fuimos invitados a hablar en el Congreso, Hogar de Cristo planteó que estos recursos sólo vienen a disminuir una brecha histórica que permitirá la continuidad operacional de varios organismos colaboradores que estaban en riesgo, en favor de los niños, niñas y adolescentes más vulnerables y vulnerados de Chile”, señaló el director social nacional del Hogar de Cristo, el sicólogo Paulo Egenau, al enterarse de la noticia. Y a continuación puntualizó: “Sin embargo, el anhelo de lograr estándares de calidad no se soluciona con esto. Es necesario generar un programa estratégico y sistémico para lograr residencias que verdaderamente protegan y reparen el daño de nuestra infancia vulnerada.  La calidad de las residencias sigue siendo un tema pendiente”.

Tras su aprobación en la Cámara de Diputados, y después de nueve meses de trámites legislativos, fue despachada la ley que aumenta la subvención para las residencias que pertenecen a organismos colaboradores del Sename.

La ley permitirá cumplir con el compromiso de duplicar el monto actual de subvención para estas residencias durante este periodo de Gobierno, comenzando con un aumento de 35%.

Tras la votación en la Cámara de Diputados, en que el proyecto fue ratificado por 138 votos a favor y 6 en contra, el ministro (s) de Justicia y Derechos Humanos, Juan José Ossa, agradeció a los parlamentarios que apoyaron transversalmente esta ley, y señaló que este en un paso importante “aunque no soluciona todos los problemas de infancia, porque para ello hay una amplia cartera de proyectos que están bastante avanzados”.

La directora del Sename, Susana Tonda, explicó que los recursos aprobados irán a favor de los más de 5 mil niños, niñas y adolescentes que viven en residencias de organismos colaboradores, “quienes verán cómo se va mejorando los modelos de intervención y la calidad de atención que reciben”. Además, reiteró que “como servicio tenemos un compromiso de ir guiando y supervisando” el uso de estos recursos.

Junto con el aumento de recursos se incluyeron en la ley temas relacionados con la probidad de los trabajadores y directivos de las instituciones en el desempeño de sus funciones; el trato digno, no discriminatorio ni estigmatizador que se debe brindar a los niños y a sus familias; y la participación del niño, así como la información al mismo, durante los procesos de intervención en los que se encuentra.