La directora de Súmate de Hogar de Cristo hizo este llamado en el marco del webinar de Comunidad Mujer al que fue invitada a exponer junto a otros expertos sobre exclusión escolar. Que todos los estudiantes tengan acceso a conectividad y a dispositivos es una de las acciones primordiales para mitigar los efectos de la pandemia en la educación.
Por María Teresa Villafrade
En Chile, cada catástrofe natural, como terremotos, incendios y tsunamis, produce irremediablemente un aumento en el abandono escolar y de ello ha dado cuenta el Ministerio de Educación que, a raíz de la crisis sanitaria, convocó a una mesa de trabajo para evitar que la pandemia de COVID-19 disparara la cifra de excluidos del sistema escolar. En 2019 el propio Ministerio estimó que, a causa de la pandemia, unos 80 mil los niños, niñas, adolescentes y jóvenes podrían desvincularse de sus escuelas.
Paula Poblete Maureira, directora de Estudios de Comunidad Mujer, dio a conocer, en el webinar “Prevenir la exclusión escolar con perspectiva de género para una reactivación sostenible”, un boletín en el que se analizaron los factores de riesgo y señaló que en esta materia, la mesa del Mineduc en su trabajo careció de una perspectiva de género.
“En nuestro análisis concluimos que el trabajo infantil y adolescente y el embarazo adolescente son dos de los factores de riesgo social más importantes en el aumento de la exclusión escolar”, señaló, dando a conocer un total de 16 propuestas cuyo contenido puedes descargar aquí.
Invitados a exponer y conversar sobre este estudio asistieron la directora de Súmate de Hogar de Cristo, Liliana Cortés, la coordinadora del programa Tu Oportunidad de ONU Mujeres, Javiera Vergara, la directora del Instituto de Estudios Avanzados en Educación y del CIAE, Alejandra Mizala y el profesor de matemáticas semifinalista de Global Teacher Prize en 2019 y ganador del premio Elige Educar a la Innovación Regional 2019, Juan Carvajal.
“Vivimos un momento histórico difícil y lo que cuenta este boletín de Comunidad Mujer se hace carne en lo que enfrento como profesor de matemáticas en la escuela pública Villa Las Peñas de Mulchén, región del Bío Bío, todos los días. Hace poco, un alumno me informó que no podía empezar sus estudios en marzo porque estaba trabajando para poder comprarse un celular y así lograr asistir a clases online. El otro día, una alumna se quemó mientras cocinaba y escuchaba clases al mismo tiempo, porque su mamá tenía que salir a trabajar”, relató el profesor Juan Carvajal.
Un aspecto que también destacó Liliana Cortés. Para la directora de Súmate, una de las principales acciones para mitigar el impacto de la pandemia en este dramático problema es entregar conectividad y dispositivos a todos los alumnos más vulnerables del país. “El hecho de que una niña tenga que subirse al cerro para conectarse a clases no puede quedar como un anécdota más en un noticiario”, agregó.
En segundo lugar, mencionó al refuerzo de los equipos psicosociales y docentes para abordar los problemas socioemocionales de los alumnos más vulnerables y, en tercer lugar, algo que parece obvio pero que no es tal, dado que no se está haciendo: poner en el centro del sistema educativo a los alumnos, más que al aprendizaje y el contenido.
Juan Carvajal aseguró que “nos farreamos todo el 2020 discutiendo si se volvía o no clases y este problema de implementar condiciones técnicas en todas las escuelas sigue pendiente. Yo tengo mejor internet en mi casa que en la escuela”, concluyó.
Te invitamos a profundizar más en este interesante debate y en lo que dijeron todos los expositores en este video de Comunidad Mujer.